19 jul 2014. Santa Clara, Villa Clara, Cuba [Coralia García]

Más de 1123 libros “Más allá de la Imaginación” fueron repartidos en diferentes repartos de la ciudad de Santa Clara el sábado 19 de julio con el objetivo de predicar el mensaje del tercer ángel a través del evangelio conocido como silencioso.

Como preparación espiritual a este impacto misionero a través de las publicaciones el sábado anterior se promulgó un día de ayuno y oración y se dedicaron estos libros al Señor.

Comparte un libro. Dilo al mundo. Dilo bien. ¡Dilo a Santa Clara! Fue el eslogan que desde meses anteriores hicieron suyo los feligreses de esta iglesia quienes también aportaron voluntariamente para la adquisición de una parte de esta literatura.

“Más allá de la Imaginación”, el libro propuesto para este año 2014, explora las maravillas de la creación de Dios y obedece a un proyecto misionero lanzado por los departamentos de Ministerios Personales y de Publicaciones en nuestra División Interamericana quienes se unieron al proyecto mundial de la distribución de este libro con el propósito predicar el mensaje del tercer ángel a través de las publicaciones con el sueño de compartir por lo menos 5 millones de este libro conscientes de que el privilegio de compartirlo con otra persona es una gran oportunidad para involucrarnos activamente en el trabajo misionero e impactar a la comunidad con el Mensaje Adventista.

Este programa también pone de manifiesto la Misión de las Publicaciones en el Plan de Dios. En Isaías 52:7 podemos leer: “¡Cuán hermosos son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas, del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice a Sion: ¡Tu Dios reina!”

Elena G. de White escribió: “Se me mostró que la obra de publicaciones se dispuso y estableció bajo la supervisión especial de Dios” (MP, pág. 58). “Nuestra obra de publicaciones se estableció según las instrucciones de Dios, bajo su dirección especial” (MP, pág. 45).

“Nuestros impresos debieran ir a todo lugar… Hay muchos lugares en los cuales no puede oírse la voz del predicador, lugares que pueden ser alcanzado únicamente por nuestras publicaciones…” (CE, p, 206).

Todo seguidor de Jesús tiene una obra que hacer como misionero. Esta fue una nueva oportunidad que Dios nos dio a través de este proyecto.